¿Y QUE HACEMOS?
Oigo las críticas a la elección de dos senadores del Partido Nuevo Progresista y pregunto a los críticos.
-¿Eres PNP? –
-No-
¿Entonces por qué opinas en lo que es una elección interna del PNP? Es igual si criticas a quien yo invito a mi casa o si yo critico a quien tú invitas a la tuya.
-¿Eres PNP?-
-Si-
-Votaste en las primarias-
-No-
¿Por qué te quejas si no ejerciste tú derecho al voto?
-¿Eres PNP?-
-Si –
-¿Votaste en las primarias?-
-Si-
¿Por qué criticas la voluntad de la mayoría, no es ella la esencia de la democracia?
Criticar es parte de el derecho constitucional a la libre expresión. Pero hagamos la crítica constructiva, o sea, con el propósito de mejorar.
Si criticamos, demos alternativas, demos soluciones. Yo no debo criticar a quienes el partido en el cual no milito postula como candidato, si debo defender el candidato de mi partido si honestamente entiendo que sería mejor gobernante.
Moraleja, postulemos los mejores candidatos y elijamos los mejores gobernantes. Critiquemos menos. Y por favor que no se entienda que lo mal hecho no se debe señalar, lo que no se debe hacer es criticar por el placer de hablar mal del adversario. Una crítica veraz es una crítica constructiva que no insulta y no ofende. Si hablamos más de lo bueno de nuestro candidato y menos de lo malo del adversario estaremos aportando a sanear a Puerto Rico. Recordemos, TODOS, somos puertorriqueños.

Escrito por La Palabra