Que nos depara el futuro.  Es la incógnita que como espada de Damocles pende sobre Puerto Rico. El problema de nuestro gobierno lo complicamos nosotros y todos somos responsables, en mayor o menor grado, del mismo. Debemos más de lo que podemos pagar. Para enfrentar el problema hay que recortar gastos y procurar mayores ingresos y aquí es que se complica la solución.

Es totalmente estéril discutir de quién es la culpa. La culpa es de todos los gobiernos que tuvimos y esos gobiernos los tuvimos porque la mayoría del pueblo los eligió. En otras palabras la culpa es del pueblo de Puerto Rico, nosotros.

Reducir los gastos requiere análisis, Hay gastos que son imprescindibles, hay gastos que son necesarios y hay gastos que son superfluos. Luego de identificarlos se requiere la voluntad, el valor, de prescindir de gastos comenzando con los superfluos. Como ejemplo, con la sola excepción de la Compañía de Turismo, para que se necesita, en estos momentos, partidas de promoción y de relaciones públicas en el resto de los departamentos, agencias, corporaciones y compañías del gobierno. Estos son gastos superfluos.

Cuantos celulares y vehículos tiene el gobierno. Por que no pueden usar sus celulares y sus vehículos los directores y jefes de las dependencias gubernamentales como medida de austeridad y ejemplo? El expresidente de Uruguay José Mujica usaba un Volkswagen del 1987 valorado en $2,000. El Papa Francisco usa un Renault de 1984. El año pasado yo vi llegar al entonces Presidente de la Cámara de Representantes, Jaime Perelló, a una actividad con una caravana de escoltas, ayudantes y vehículos que rivalizaba con la del gobernador. Este año vi llegar, a una actividad en Isabela, al actual Presidente de la Cámara de Representantes Carlos “Johnny” Méndez solo con su esposa y él conducía el vehículo. Claro está no se trata de los partidos se trata de las personas.

Hay gastos que son imprescindibles como maestros, policías y médicos pero aún en dichos departamentos,(Educación, Seguridad y Salud) hay gastos superfluos.

Se habla de hacer recortes en los gastos de deportes, cultura y ayuda social y ello sería un grave error,estos no son gastos imprescindibles ni superfluos pero si necesarios.

El enfoque primario debe ser cómo generar mayores ingresos y esto no debe ser con mayores impuestos. Hay que promover las exportaciones, el turismo y atraer más industrias facilitando los permisos y dando exenciones contributivas que compitan con las que da New York y la República Dominicana para fomentar así más empleos.

Hay que hacer recortes y hay que aumentar ingresos. Lamentablemente la tradicional falta de voluntad, por el miedo de perder las próximas elecciones, la trivialidad política y la falta de poderes, consecuencia de nuestro estado colonial, nos llevó a la imposición de la Junta de Supervisión Fiscal.

Que distintas serían las cosas si ante la actual crisis económica el PPD y el PIP, en un utópico acto de desprendimiento patriótico, se unieran al gobernador Rosselló a luchar por salvar a Puerto Rico. Se envainaría la espada de Damocles y volveríamos a ser “la tierra del edén la que al cantar, el gran Gautier llamó la perla de los mares”.

 

Escrito por La Palabra